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¿Columnas de hojas y cuadernos que no sabes ni qué contienen? Hoy en Copistería Low Cost te contamos algunos trucos que te servirán para ordenar tus apuntes de manera práctica y sencilla. ¡Empezamos!
Ordena tus apuntes y tus esquemas por tema y cronología
Tener un buen temario es esencial para estudiar, y tenerlo bien organizado, más aún. El mejor consejo que podrás leer es que ordenes todos tus apuntes por fechas y por temáticas. Es lo más práctico y fácil de localizar a la hora de estudiar. Pero más allá de eso, la clave está en el material que utilices y en cómo coloques dentro cada cosa.
Puedes optar por infinidad de materiales distintos, pero aquí te proponemos algunas formas para organizar tus apuntes por tipos de carpetas, bandejas, colores, etiquetas… etc
Bandejas o archivadores
Las bandejas van muy bien para crear grandes secciones de apuntes. Por ejemplo, en una primera bandeja puedes colocar lo que estás estudiando ciertos días, lo reciente que vas a tener que estar sacando y recogiendo más habitualmente.
En la segunda bandeja puedes colocar el resto de temario de planificación a largo plazo, y en la tercera, siempre está bien tener folios en blanco para imprimir o para utilizar para hacer esquemas y resúmenes a la hora de memorizar.
Coloca los resúmenes y esquemas por separado
Una buena opción es tener un cuaderno en el que hagas todos los esquemas de cada resumen. Es decir, una vez resumas un tema, tener un esquema en un cuaderno de manera visual te facilitará mucho el estudio, y tener todos los esquemas en un mismo cuaderno será ideal para repasar.
De esta forma, cuando repases, no tendrás que buscar el esquema en cada tema, sino que tendrás tu cuaderno de esquemas listo.
Carpetas por colores y etiquetas: tus mejores aliadas
Escoger carpetas con colores te permitirá encontrar los apuntes más fácilmente. Puedes organizarlos por asignaturas y utilizar etiquetas con el nombre para que la búsqueda cuando los necesites sea todavía más rápida.
Carpetas tipo acordeón o con anillas para archivar
En cuanto a los apuntes viejos que ya no utilices, una buena opción son las carpetas de anillas o tipo acordeón. Te permiten archivar los apuntes en grandes secciones, con etiquetas en el caso de las de acordeón o una hoja con el título en el caso de las de anillas, y así tener claro qué es lo que tienes archivado para organizarlo y guardarlo.
La clave está es tener a mano lo que vayas a utilizar, por carpetas con etiquetas y en bandejas y archivadores, y por otro lado, tener bien guardado lo que ya no uses o quieras archivar pero siempre de manera ordenada.
No guardes todo
No tienes por qué guardar todos los apuntes de tu vida. Puedes almacenarlos en cajas o en carpetas de anillas, sí, pero ocuparás una cantidad de espacio increíble.
Lo ideal es guardar los apuntes de asignaturas y cursos que puedan volver a servirte, y por supuesto a los que les guardes un cariño especial. Pero sobre todo guarda los del último o últimos cursos, nunca sabes si van a poder servirte a ti o a un amigo en algún momento.
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